Cocina robotizada

• Qué se necesitaba: Módulos lineales eléctricos
• Requisitos: Componentes robustos que funcionen también bajo altas temperaturas y posible contaminación. Además, todos los componentes debían estar libres de lubricación externa.
• Sector: máquinas expendedoras
• Éxito para el cliente: Al utilizar materiales de igus®, no se requiere lubricación que pudiera contaminar la vajilla. Además, fue posible un diseño más compacto, lo que permitió reducir el volumen de la máquina.

Cook-e quiere hacer frente a los problemas de la hostelería actual con su cocina robotizada. Cada vez son más los jóvenes que se deciden por un empleo que les obligue a trabajar de noche o los fines de semana. Además, a los hosteleros les suele resultar difícil encontrar personal cualificado. Al mismo tiempo, el coste de los alimentos de alta calidad sigue aumentando. Un dilema que está causando problemas a muchos empresarios.

La cocina robotizada está pensada para su uso en la cocina de un restaurante o en una zona de autoservicio. Estos lugares ponen a prueba las máquinas, sobre todo por el calor y la humedad que provoca la actividad. Por ello, los componentes deben estar exentos de lubricación y ser especialmente robustos. La higiene también desempeña un papel importante y debe cumplir las normas más estrictas.

Otro reto es que la cocina robotizada debe ser compacta, ya que las cocinas suelen ser pequeñas y el coste por metro cuadrado de los restaurantes está aumentando considerablemente. Especialmente en las zonas urbanas y las metrópolis, los restauradores luchan contra los elevados alquileres.

La cocina robotizada ofrece platos frescos en poco tiempo. Los pedidos de los clientes se envían directamente al robot, que empieza a prepararlos de inmediato. Los módulos de la cocina robotizada son capaces de dosificar los ingredientes con precisión. El ingrediente cae en el cubo de transporte, que lo traslada a una especie de sartén que puede girar e inclinarse sola. Todo está controlado por software y se calienta por inducción. El cubo de transporte y la bandeja se limpian automáticamente después de cada uso. Al automatizar tareas sencillas y reducir los costes asociados, los restauradores pueden invertir más capital en ingredientes para ofrecer mejores platos.

El robot de cocina cumple las normas de higiene (APPCC). En este sentido, el uso de ejes de correa dentada de igus® es una verdadera ventaja, ya que igus® fabrica los travesaños y las guías lineales de acero inoxidable resistente a la corrosión. Los carros se mueven sobre cojinetes lineales de plástico de alto rendimiento. Como resultado, los cojinetes de deslizamiento no requieren lubricación y, por lo tanto, no necesitan mantenimiento. Además, las soluciones de igus® permiten un diseño más compacto, lo que significa que se puede reducir el volumen de la máquina.