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Con los robots se pueden realizar muchas aplicaciones diferentes. Además de las tareas clásicas de pick & place o paletizado, el control de calidad también puede automatizarse de forma eficiente. Las ventajas de los sistemas robotizados en el control de calidad son su precisión y calidad fiable: todos los procesos son exactamente repetibles. Los procesos de inspección pueden variar enormemente en función del producto y la industria. Los robots de igus® se basan en un sistema modular y, por lo tanto, se pueden adaptar de forma flexible a su aplicación. Estaremos encantados de asesorarle sobre qué tipo de robot es el más adecuado para su proceso.
En su control de calidad automatizado, la aplicación comprueba, entre otras cosas, si los relojes alcanzan el tiempo mínimo de funcionamiento. Para ello, utiliza un robot lineal de sala de igus® y una cámara. Esto permite acercarse a todos los relojes individualmente y comprobarlos mediante la imagen de una cámara.
El sistema de pruebas al final de la línea de producción se montó con medios convencionales. Se necesitaba una solución eficaz para probar las fuentes de alimentación. Ahora, el robot realiza todo este ciclo de pruebas. El operario puede realizar otras actividades durante ese tiempo. El robot proporciona resultados de medición objetivos, lo que mejora la calidad de la prueba.
Para medir la fuerza de resistencia al cortar con cuchillos de cocina profesionales, se ha construido un dispositivo de medición que permite realizar un corte consistente a través de un papel de referencia. La fuerza de resistencia indica entonces el estado de la hoja y si es necesario repasarla en un punto determinado.

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